Allí se reunió con Fidel Castro, su esposa, sudadera del psg Orlando Borrego y el grupo de guerrilleros que lo acompañaría a Bolivia. Poco después, entre septiembre y octubre de 1966, el Che Guevara volvió a reunirse con Perón en Madrid, para pedir el apoyo del peronismo a su proyecto guerrillero en Bolivia. Tras analizar varias opciones, el Che Guevara, con apoyo de Fidel Castro, decidió establecer un foco guerrillero en Bolivia, un país que, estando en el corazón de Sudamérica, y limitando con Argentina, Chile, Perú, Brasil y Paraguay, permitía extender con facilidad la guerra de guerrillas a todo el subcontinente, sobre todo a su país natal.